¿Cuántas veces has intentado dejar el tabaco? Eliminar este hábito nocivo de tu vida
cotidiana puede ser muy difícil. Parches de nicotina, cigarrillos electrónicos, caramelos, etc. Si te identificas con las personas que dicen: “he probado de todo y nada me ha funcionado”, ha llegado el momento de dejar de lado esta relación tóxica.
Cómo dejar de fumar
Hay personas que prefieren cortar este hábito de raíz. Sin embargo, otras, prefieren ir disminuyendo el número de cigarrillos a diario y hacerlo progresivamente. Con independencia de cuál sea tu caso resulta esencial que sigas estos consejos.
Pensar en tu motivación y mentalizarte
Para cumplir cualquier tipo de objetivo, debes aferrarte a una motivación muy clara y concreta. De este modo, cuando tengas tentaciones o momentos de debilidad, podrás recordar esa motivación y evitar coger un cigarro. Una motivación qe puede funcionarte es el hecho de ahorrar dinero. Pensar en las vacaciones que puedes tener con todo ese dinero ahorrado puede serte de gran ayuda.
Además, deberás establecer una fecha clave para empezar a hacerlo, una que puedas cumplir.
Escoger actividades y actos que puedan sustituirlo
Ante todo, tendrás que desempolvar aquellas actividades que antes te gustaban y que pueden sustituir este nocivo hábito. Por ejemplo, si antes te gustaba salir a nadar, en los días que tengas más ansiedad por el síndrome de abstinencia, será el momento de recuperar esa actividad.
De la misma forma, es recomendable que cuando tengas ganas de fumar le digas a tu cerebro “te daré lo que me pides dentro de 10 minutos”. Muchas personas colocan un cronómetro hasta pasar 10 minutos. Pasado ese tiempo, podrás decidir si le concedes o no ese “antojo” a tu organismo.
Deja de lado las excusas para dejar de fumar. Recuerda que desconectar de hábitos poco saludables implica compromiso y constancia. Hay muchos obstáculos en el camino, pero lo importante es volver al mismo.