Dejar de fumar es un objetivo de muchas personas que quieren llevar una vida sana.
Sin embargo, como en todas las luchas contra adicciones, hay complicaciones que no hacen sencillo abandonar el mal hábito.
A continuación, se repasan, esperando que sirvan como estímulos, los efectos positivos que dejar el tabaquismo tiene para la salud.
Los primeros beneficios para la salud de dejar de fumar
Algunas ventajas para la salud de abandonar el consumo de cigarrillos y derivados se van a empezar a notar desde las primeras horas y semanas. Se trata, entre otras, de las siguientes:
– Descenso de la presión arterial y los niveles de monóxido de carbono en sangre a niveles normales
– Incremento que sitúa también en niveles normales el de oxígeno en la sangre
– Disminución de los riesgos de ataque cardíaco súbito
– Normalización, por la mejoría que experimentan las terminaciones nerviosas, de los sentidos del gusto y olfato
– Mayor fluidez de la circulación sanguínea, lo que contribuye a las funciones pulmonares y respiratorias
– El riesgo de padecer una cardiopatía coronaria se reduce a la mitad
– Similar disminución de los riesgos de sufrir cánceres como los de garganta, pulmón, esófago y boca
Mejorar tu salud también en otros aspectos
Efectivamente, dejar de consumir tabaco tiene otros beneficios que quizás el lector no conozca:
– Menos posibilidades de coágulos de sangre transmitidos entre las piernas y los pulmones
– Control de problemas como la disfunción eréctil
– Reducción de los problemas en el embarazo
– Estado y aspecto más saludables de la dentadura y piel
Una decisión relacionada con la vida sana
Dejar de fumar, por tanto, supone una apuesta por un plan de vida saludable, ya que la salud mental, además de la física, también se verá favorecida. Por eso, acudir a un gabinete psicológico especializado en adicciones puede ayudar grandemente a este objetivo