Es innegable que la COVID-19 llegó para cambiar la forma de vida, las interacciones sociales y, posiblemente, el futuro. Pero también es una realidad que el cuerpo y la mente no son inmunes a estos cambios tan drásticos en el día a día. El estrés ha hecho aparición de manera alarmante, especialmente cuando una persona cercana fallece o incluso si sufres en carne propia la…
